Gestión Ambiental
jueves, 14 de agosto de 2014 a las 09:15 AM

Viabilidad para proyecto de engorde de peces

El Instituto Correntino del Agua y del Ambiente (ICAA) otorgó la viabilidad ambiental y concesión de uso de agua pública al proyecto de engorde de peces en el arroyo Yacareí, que confluye en el Río Paraná en San Carlos, Departamento Ituzaingó.

[ITUZAINGO, SAN CARLOS]-

Por Resolución Nº 431/14 el ICAA declaró ambientalmente viable el proyecto de engorde de especies nativas en jaulas, propuesto por la firma Gerula S.A., la cual consiste en el engorde en jaulas o tanques redes de tres especies nativas de peces Surubí (Pintado), Surubí (Atigrado o Pirá Para) y Pacú.

El área de emplazamiento es la bahía del arroyo Yacareí; la superficie solicitada en la primera etapa es de 12 hectáreas, la cual es dividida en polígonos que determinan 3 áreas acuícolas. La ubicación de la base de operaciones del proyecto de una fracción de 2 hectáreas del inmueble determinado como Lote Tres de la división “Campo Santa Rosa”, en la Segunda Sección, Distrito San Carlos, Departamento Ituzaingó.

Concesión de agua pública

Así también por Resolución ICAA Nº 460/14 se otorgó la concesión de uso del espejo de las aguas públicas al mencionado proyecto, que tiene por único objeto la explotación por engorde de especies como Surubí y Pacú, utilizando jaulas de capacidad 27 metros cúbicos para una primera etapa y para una segunda etapa de producción de 108 metros cúbicos y fue otorgado con carácter eventual.

En la normativas el organismo provincial establece que el titular del proyecto deberá denunciar en forma diligente la aparición de contingencias o emergencias y eventualmente las medidas urgentes que se hubieran tomado antes de la intervención de las autoridades competentes y del ICAA, como así también presentar el Plan de Restauración correspondiente y luego las constancias de su cumplimiento.

Asimismo el titular del proyecto deberá facilitar el cumplimiento de las actividades de vigilancia y control en las distintas etapas del proyecto a fin de verificar el cumplimiento de las condiciones, la eficacia de las medidas de mitigación adoptadas y la exactitud y corrección de la Evaluación de Impacto Ambiental (EIA).